A veces, solo con salir de casa unos días y escapar a el pueblito bueno es suficiente para recargar las pilas.

Pasar unos días de verano tranquilos, sin móviles, sin reloj, sin tiempo... pero no de ese que hueles, sino de ese que te marca los minutos, los segundos, y que solo oyes tic tac.

Ese tiempo lo deje en casa, y me centre en el bueno, en el del sol, el del viento, y el del ensordecedor ruido de las hojas de los chopos agitarse unas con otras, el del agua revoltosa contra las piedras del río, el del mercadillo de los domingos...

Tiempo del bueno...

En el huerto...
Muy fan del huerto de mi aita, pero sobre todo del rinconcito a la sombra que se ha preparado rodeado de hortensias y desde donde vigila atento como van sus sandías, tomates, calabazas, flores...
La verdad que las cosas así saben únicas, nada que ver con el supermercado; para que engañarnos.







En el mercado...
Algo tienen los mercadillos de los domingos, que todo es tan campechano, tan de andar por casa, y tan lleno de encanto. No hay cartelitos monos con florecillas anunciando el precio del tomate, ni preciosas latas de tés llenas de flores al lado de las zapatillas. Es lo que hay, lo que ves, es lo que hay; aquí no hay adornos que valgan, todo es natural, tan natural... que la vista no engaña...
Y por supuesto algo me compre, bueno mi ama, unas zapatillas tipo converse con un montón de florecillas, ya os la enseñare un día de estos.





En el río...
Una cosa que tiene el pueblito bueno, es río de esos bonitos, rodeados de verde por todos lados, con orillas de piedras grisáceas y redonditas, donde uno puede sentarse a leer, a descansar, o simplemente tumbarse mirando que forma tienen las nubes.
Ahí, el tiempo pasa solo... el tiempo bueno, el que os decía, el de los rayos de sol entre los arboles y del gorgoteo del agua río abajo.




La Presa...
Esto es lo mejor, pasear por la ribera, a través del camino de cipreses que comunica los dos pueblos mientras ves como cae el sol tiñendo de dorado todo el agua, es una de esas cosas donde te sientes insignificante, y a que a la vez te cargan tanto de energía... que vuelve una como nueva, con batería a tope. No hace falta cargador, hay carga para rato.



¿Qué tal van vuestras pilas?

Feliz Martes ❤

Post Data
He vuelto con energías renovadas
y eso que aún no me he cogido vacaciones.